UNA DERROTA Y MUCHO PARA ANALIZAR...

COMU sucumbió nuevamente por tercera vez consecutiva en siete días (octava en la 2007/2008). Esta vez fue en Rosario ante Central Córdoba por 2 a 1. Un partido con muchos matices, un arbitraje de Delfino espantoso, una figura excluyente como Cristian Calabrese -autor de los dos tantos para el Matador- y un equipo que tiene una materia pendiente: dar vuelta un resultado negativo.

El primer sentimiento que nos dejá la derrota, es de decepción. COMU en la cancha no respondió en ningun momento, fue a lo largo de los 90 minutos un conjunto de individualidades y no un equipo en sí. Se repetieron las falencias a la hora de generar juego, principalmente por estar tan separadas las líneas del mediocampo y el ataque. Esto contra un team compacto, como lo fue Central Córdoba, se paga caro.

Sobran los dedos de una mano para contar las jugadas hilvanadas -sólo una llevo real peligro: fue en el ST donde Vildozo se la baja a Muñoz, que la tira al Parque Irigoyen-. Lo más peligroso fueron algunos desbordes de Sartori, Pérez y Lucero pero todo muy bien controlado por los centrales charrúas. Tanto Del Mastro como Cruz marcaron bien a To-To Torres, que salvo en una jugada donde se la pica al arquero y se va por arriba del travesaño, no gravitó para nada. Con este panorama, achacarles algo a Vildozo y Lucas Rodríguez, otra vez reemplazado, es poco serio.

Por otro lado, no descubrimos nada diciendo que se perdió la solidez, algo que caracterizaba a COMU a lo largo de este campeonato. Preocupa lo de la defensa, un punto fuerte en esta campaña, que ha repetido algunas distracciones, sobre todo por el lado de Monzón, las cuales causaron los goles y algunas jugadas de riesgo para la valla de Giordano. La realidad es que sólo Calabrese, un futbolísta distinto para la 1ra. B, los volvió loco a todos. Por un momento, El Pelado nos hizo recordar mucho el trabajo de Gianfelce en COMU: pedia, encaraba y aguantaba la pelota cerca del area. Además, se dio el gusto de hacer un gran gol: el goleador se tomó su tiempo y la picó por sobre Giordano, que nada pudo hacer ante la vaselina.

Pero volviendo a COMU, marcabamos al principio del comentario, el problema que Eduardo Pizzo aún no pudo (o no supo) resolver: el revertir una derrota. Sólo en tres ocasiones (Flandria en Jauregui, Sarmiento en Agronomía y Estudiantes en Caseros) se llegó a la igualdad, estando en desventaja. Todo eso ocurrió en el 2007. Año nuevo, peor es la situación. Exceptuando el encuentro con Deportivo Merlo -un partido que no se jugó en condiciones normales-, contra All Boys, Defensores y este sábado en el Gabino Sosa se repetió el mismo sintoma: el desorden. No por poner tres o cuatro delanteros y dos enganches, estos te van asegurar ganar un partido por goleada. En estas condiciones planteadas, COMU carece de orden, algo fundamental para no entrar en la desesperación, que lo único que hace es favorecer al contrario.

Pese al descuento de Vildozo, COMU en la cancha no transmitía la sensación de poder llegar al empate. Jugar a los ponchazos para que el refente de area se las arregle no sirve. Si uno lo busca por la vía del tiro libre o la pelota parada en forma de centro está difícil, porque todavía es algo que COMU en lo que va del campeonato no supo capitalizar. La mejor opción es jugar al fútbol, poner la pelota contra el piso y dar el golpe en el momento justo. COMU lo sabe hacer y muy bien. Esas cosas no se olvidan de una semana a otra.

Este comentario no es para dramatizar, pero derrotas son derrotas, las mismas dejan cosas para analizar y uno desde este espacio, trata de dar su punto de vista. No quedan dudas, que la semana que dejamos atrás, será para el olvido de todos los hinchos carteros. Ahora se viene Los Andes, un grande de la categoría, en Agronomía, lugar donde COMU se hace fuerte, un lindo rival para sacarse la espina que todos llevamos dentro.

Así formó Comunicaciones: Matías Giordano; Ricardo González, Ariel Monzón, Lucas Banegas; Homero Sartori, Daniel Muñoz, Ángel Arco (Nelsón Camargo), Ricardo Pérez (Iván Sequeira); Jonathan Torres; Angel Vildozo y Lucas Rodriguez (Alexander Lucero).
En el banco estuvieron, pero no ingresaron: Lucas Echenique, Matías Maroni, Matías Neto y Cristian Baz.

VERGONZOSO ARBITRAJE
Parrafo aparte para el pauperrimo arbitraje de Germán Delfino. Salvo en el agarrón de Miño a Ricardo González, en lo demás fue un desastre. Un Central Córdoba-Comunicaciones no le deberia representar mayores inconvenientes a un arbitro que hace dos temporadas dirige en la B. Todo lo tranquilo que venia la mano en el PT, lo termino de degenerar en el ST. Careció de autoridad ante los alcanzabalones, en varias jugadas las pelotas se las habia llevado Gasparín, dejó pegar mucho, no hubo un mismo criterio a la hora de las tarjetas, pero la frutilla del postre estaba reservada para el final. Luego del penal que ejecuta y convierte Vildozo, El Angel hace un gesto de silencio hacia el público de Central Córdoba, que lo habia insultado a más no poder. El juez lo habia advertido, pero ante la botoneada de Bezombe -de pésimo partido- no le quedo más remedio que expulsarlo. Cinco minutos más tarde, en una situación confusa, Calabrese cae desplomado en el campo. En níngun momento, Delfino vió la jugada pero se baso en el relato del línea, el cual le advierte un supuesto cabezazo del jugador de Central Córdoba a Banegas y la reacción del Negro, y este fue suficiente para que los dos se vayan a las duchas. Inmediantamente hubo un tumulto, en el cual participó hasta Eduardo Pizzo, tratando de separar. Después de esa situación nada fue igual, el partido a Delfino se le habia ido de las manos. Generalmente COMU no reniega de los reeferes y hace muy bien, pero tampoco tiene que dejar pasar este tipo de malos arbitrajes, él cual te puede costar, mucho más que una simple derrota.